No sólo podemos destacar lo que está mal, también las mejoras que se puedan acometer tanto para la ciudad como para los vecinos, que al fin y al cabo es lo importante.
El primero de estos aspectos es la eliminación de las barreras arquitectónicas. En concreto en pasos de peatones, semáforos o esquinas. En este caso es el que se ubica a la altura de la Iglesia de Santa Cruz y que cruza diariamente muchísima gente hasta no hace muchos días con dos altos escalones como los de antaño.
El rebaje de las aceras se están acometiendo por toda la ciudad, y es uno de los elementos que más hincapié se está haciendo por parte municipal, con el objeto de hacer de Cádiz una ciudad más transitable, sobre todo para personas con movilidad reducida, ancianos, coches de bebé.

Es una zona de visibilidad nula y que provocaba problemas entre usuarios del carril bici que transcurre por esta zona, y peatones. Los ciclistas son los que realmente van a mejorar mucho su seguridad al evitarse choques o atropellos.
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