Este sábado se veía en Cádiz una imagen que afortunadamente cada vez se repite más, cientos de cruceristas paseando por la ciudad, venidos de los dos barcos cruceros atracados en los muelles gaditanos y por otro lado, otros dos barcos en los astilleros para ser reparados.
Este es el presente cada vez más visible de la economía gaditana, la del turismo de cruceros que sigue en auge convirtiendo a nuestra ciudad en un referente cada vez más patente. Un beneficio para el puerto de la Bahía de Cádiz por las tasas que conlleva, pero sobre todo para la ciudad, para su comercio y hostelería que ven como estos turistas gastan sus euros.
La segunda imagen, aún incipiente y que debe ir creciendo, es el de las reparaciones de los barcos cruceros. El astillero gaditano, referente en materia de reparación, ve como cada vez son más navieras las que confían en él para poner a punto sus barcos cruceros.
Aquí las navieras española deberían ser consecuente y apostar por las empresas nacionales como es Navantia creando empleo, dando estabilidad laboral a cientos de trabajadores directa e indirectamente.
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